Conforme avanza el día de nuestro evento, se acercan decisiones que son inevitables; el lugar, las flores, música y una de ellas, y sin duda de las más importantes, definir los invitados a tu fiesta

Como sabes, el banquete ocupa una parte muy importante del presupuesto. La regla dice que un 20 a 25 por ciento es lo que se debe considerar para destinar a los platillos de los asistentes, de ahí lo difícil de la situación. Sabemos que en la mayoría de los caso nos gustaría invitar hasta al médico que nos trajo al mundo, pero la realidad es que debemos tener siempre presente el presupuesto. Por eso te compartimos algunas recomendaciones que te van a ayudar a no padecer este caso.

En primer lugar define el menú o maneja un par de alternativas con sus respectivos costos; puedes pensar en una expectativa alta, media y baja, ojo, esto no quiere decir que baje la calidad, simplemente cada platillo tiene su grado de complejidad y ocupa diferentes materiales. Considera también un menú infantil, ya que por lo general éste tiene un costo inferior y así haces más eficiente los recursos; además de que no haces padecer a los pequeños con una costra de langosta cuando ellos lo que quieren son unos nuggets de pollo con papas fritas.

Elabora una lista con todos tus invitados, desde tus amigos, amigos de la familia, amigos de los amigos, etcétera; si es una boda deben elaborar la lista de él o ella también, ojo este puede ser un punto complicado en el que lo mejor es 50-50 y una plática tranquila de por medio.

Con la lista de invitados de tu fiesta, las estimaciones de los platillos y el presupuesto destinado ya sabes a cuanta gente puedes invitar. Considera primero a tu primer círculo, es decir la familia cercana y personas más allegadas, después poco a poco ve descartando gente de la lista de invitados de acuerdo a la relevancia en tu vida; no pasa nada si no invitas al manicurista de tu tía, el punto es que ese gran día esté quien debe estar.

Considera un ligero excedente, ya que si bien es cierto que has padecido eliminando de la lista a posibles invitados a tu fiesta y que has pedido que confirmen su asistencia, nunca falta un imprevisto que puede ocasionar que toda tu buena organización se venga al traste. Por lo general si invitas a cien personas, debes considerar quince platillos de más.

Ahora que si lo tuyo es desprenderte y el presupuesto no es problema, por lo menos evita invitar a gente que no conoces o sabes que puede meter mala vibra en tu celebración.

Por último, pide a alguno de tus allegados que se responsabilice de ese tema el día del evento, dale autoridad para gestionar platillos adicionales solo en caso de emergencia, si es que te lo permite el servicio, y tu dedícate a disfrutar de tu fiesta.